La ortodoncia no solo mejora la estética, sino que establece una mejor relación entre los dientes y los huesos que los albergan. También previene el desgaste prematuro y mejora la higiene dental (previniendo caries y enfermedad periodontal). Unos dientes bien colocados se cepillan mejor que dientes muy apiñados.
Hoy en día, la ortodoncia puede corregirlo prácticamente todo. El apiñamiento de dientes, dientes excesivamente separados, mordida cruzada, sobremordida, protrusión.
La edad ideal para empezar a controlar y vigilar si aparece algún problema ortodóncico es a los seis años coincidiendo con el primer recambio dentario. No siempre hay que actuar a esas edades.